San Pedro, roca sólida sobre la que Cristo estableció su Iglesia,
Tú que caminaste sobre las aguas con fe,
Tú que confesaste a Cristo como Hijo del Dios vivo,
Intercede por nosotros ante el Señor.
San Pedro, que negaste a Cristo, pero fuiste devuelto a su amor,
Enseñadnos humildad y arrepentimiento,
Ayudadnos a reconocer nuestras debilidades y a volvernos a Dios con corazón contrito.
San Pedro, primer Papa y primer testigo de la resurrección,
Fortalece nuestra fe en Jesucristo,
Inspíranos a dar testimonio del Evangelio con audacia y celo,
Y guíanos por el camino de la santidad y la fidelidad a Dios.
San Pedro, protector de pescadores y marineros,
Vela por nosotros en nuestros viajes y trabajos,
Protégenos de los peligros físicos y espirituales,
Y condúcenos sanos y salvos al puerto de la vida eterna.
San Pedro, te confiamos nuestras intenciones y oraciones,
Particularmente [menciona aquí tu intención personal],
Y te pedimos que intercedas por nosotros ante el Altísimo.
Amén.