Virgen María, Reina de la Paz,
Tú que apareciste en Medjugorje
Con un mensaje de amor y conversión,
Nos dirigimos a ti con fe y esperanza.
Día 1:
Nuestra Señora, Reina de la Paz, nos dirigimos a ti con confianza. Te confiamos nuestras intenciones y oraciones, pidiéndote que nos guíes para encontrar la paz interior y vivir según la voluntad de Dios.
Día 2:
Nuestra Señora de Medjugorje, que se apareció con un mensaje de amor y conversión, te rogamos. Guíanos por el camino de la fe, abre nuestros corazones a la gracia divina e intercede por nosotros ante tu Hijo, Jesús.
Día 3:
Nuestra Señora, Madre tierna y compasiva, te confiamos nuestros miedos y angustias. Protégenos, envuélvenos en tu amor maternal y ayúdanos a confiar en la divina providencia.
Día 4:
Nuestra Señora de Medjugorje, que nos invita a la oración y al ayuno, ayúdanos a profundizar en nuestra vida de oración. Inspíranos a ofrecer nuestros sacrificios por la conversión del mundo y a vivir en armonía con Dios.
Día 5:
Nuestra Señora, refugio de los pecadores, te confiamos nuestras debilidades y pecados. Concédenos la gracia de la contrición sincera y guíanos al sacramento de la reconciliación para renovar nuestra relación con Dios.
Día 6:
Nuestra Señora de Medjugorje, Madre de la Iglesia, protege a la Iglesia universal y a todos sus miembros. Ayúdanos a ser testigos fieles del Evangelio y a contribuir al crecimiento de la fe en nosotros y a nuestro alrededor.
Día 7:
Nuestra Señora, modelo de fe y obediencia, te rogamos. Ayúdanos a seguir tu ejemplo de fidelidad a Dios, a aceptar con valentía la voluntad divina y a abrazar con alegría nuestra vocación cristiana.
Día 8:
Nuestra Señora de Medjugorje, consoladora de los afligidos, te pedimos consuelo en nuestras pruebas. Fortalécenos en nuestra fe, danos la paciencia y la perseverancia para superar los desafíos de la vida.
Día 9:
Nuestra Señora, Reina del Universo, te consagramos nuestras vidas y nuestras familias. Protégenos, guíanos y acompáñanos en nuestro camino hacia la santidad, para que vivamos en armonía con Dios y con los demás.
Amén.