O María, dulce Madre del corazón inmaculado,
Nos dirigimos a ti con confianza y amor.
Tu corazón, puro y lleno de gracia,
Es un refugio para todos los que buscan consuelo y protección.
Día 1 :
Consagración al Corazón Inmaculado: Oh María, nos consagramos a tu Corazón Inmaculado con confianza y amor. Que tu Corazón sea nuestro refugio e inspiración durante toda esta novena, te lo pedimos.
Día 2:
Protección maternal: Virgen María, nuestra amada Madre, protégenos bajo tu manto maternal. Protégenos de los peligros físicos y espirituales, y guíanos por el camino de la santidad.
Día 3:
Humildad y fidelidad: María, modelo de humildad y fidelidad, enséñanos a seguir tu ejemplo. Ayúdanos a vivir en obediencia a la voluntad de Dios y a servir con un corazón humilde y alegre.
Día 4:
Ternura y compasión: Madre de misericordia, imprégnanos de tu ternura y compasión. Ayúdanos a reconocer las necesidades de nuestros hermanos y a responder con amor y generosidad.
Día 5:
Consuelo en las pruebas: María, Consoladora de los afligidos, ven en nuestra ayuda en los momentos de sufrimiento y dolor. Que tu presencia maternal alivie nuestros corazones y nos dé la fuerza para perseverar en la fe.
Día 6:
Protección de las familias: Santa Madre de Dios, protege a nuestras familias bajo tu manto sagrado. Concédenos la gracia de vivir en la unidad y el amor, y vela por todos los que nos son queridos.
Día 7:
Poderosa Intercesión: María, mediadora de todas las gracias, intercede por nosotros ante tu divino Hijo. Presenta nuestras oraciones y súplicas, y obtén para nosotros las gracias que necesitamos.
Día 8:
Consagración del mundo: Virgen María, te encomendamos el mundo entero. Que tu Corazón Inmaculado triunfe sobre el mal y el error, y que todos los pueblos se vuelvan a Dios con arrepentimiento y conversión.
Día 9:
Consagración final: Oh María, Reina del cielo y de la tierra, te consagramos nuestras vidas, nuestras familias y nuestro mundo. Que tu Corazón Inmaculado reine en nuestros corazones, ahora y siempre. Amén.